Política de copias
Copiar enseña a los alumnos a basarse en las ideas e imágenes de otros.
Por lo general, las ideas para los dibujos proceden de una de estas tres fuentes: la memoria, la imaginación o la observación. Los niños dibujan en función de su implicación emocional con el tema. Perciben e ilustran el mundo que les rodea de forma diferente a los adultos. Por eso los dibujos "infantiles" son más imaginativos que realistas.
Cuando permitimos copiar o demostramos "cómo dibujar" para obtener resultados predeterminados, estamos enseñando a los alumnos que sus ideas no son suficientemente buenas. Cuando se copia de una imagen de revista o de una fotografía (de 2D a 2D), las decisiones principales ya han sido tomadas por el alumno: composición, colocación en la página, valores, intensidad del color, etc. El alumno piensa muy poco por sí mismo. Al observar (mirar) un objeto tridimensional y transferir esa imagen a una superficie bidimensional, el alumno participa en muchas más estrategias de pensamiento. Es más importante enseñar a los alumnos "cómo ver" para dibujar que "cómo dibujar" para ver.
- No permita que se hagan copias en clase. Esto incluye la copia "a mano alzada" de ilustraciones, fotografías, patrones comerciales o materiales duplicados.
- El uso de mesas de luz/trazado y técnicas de cuadrícula debe limitarse a copiar únicamente el diseño original del alumno.
- El trabajo artístico debe realizarse a partir del diseño original del alumno y no de instrucciones paso a paso.
- Los profesores nunca deben dibujar sobre las obras de los alumnos. Demuestre las técnicas en papel de borrador o al margen, pero deje siempre que los alumnos completen su propio trabajo.